La OMS define el envejecimiento activo como el proceso de optimización de las oportunidades de salud, participación y seguridad, con el fin de mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen.
El deterioro cognitivo causado por la edad se debe a los cambios que se producen en el cerebro sano al envejecer, estimándose que a los 90 años habría una destrucción del 30% de las células nerviosas. Los factores que más influyen en el tipo y el ritmo de deterioro son el estado de salud general, factores hereditarios, nivel de actividad física, nivel educativo y/o cultural y factores económicos, sociales y familiares. Por lo que se valoran como índices de predicción del envejecimiento exitoso, el no tener enfermedades crónicas, tener un mayor nivel de actividad, disfrutar de buen estado anímico, ausencia de deterioro cognitivo, así como un mayor nivel de implicación en actividades física, sociales e intelectuales.
La función cognitiva de un individuo es el resultado del funcionamiento global de la percepción, atención, habilidad viso-espacial, orientación, memoria, lenguaje y cálculo, algunos de los cuales sufren un grado de deterioro variable con el envejecimiento.
De ahí la gran importancia en la participación con elevada frecuencia en talleres individuales o grupales con programas de intervención cognitiva, los cuales son muy eficaces para mantener y estimular el funcionamiento cognitivo. Las intervenciones dirigidas a estimular y a ejercitar las habilidades cognitivas pueden actuar contrarrestando los efectos negativos del envejecimiento, retrasando la aparición del deterioro cognitivo en adultos mayores.
Desde hace 2 años Tacte Social es la empresa encargada de llevar a cabo los Talleres de Memoria impartidos en los municipios de Teulada y Moraira. En estos talleres se pretende llevar a cabo una mejora de dicha función cognitiva.
La memoria humana es la función cerebral que resulta de las conexiones sinápticas entre las neuronas, consiguiendo así que cualquier ser humano pueda retener experiencias pasadas. La memoria ayuda a identificarnos, a saber quiénes somos, dónde estamos y qué hacemos, a recordar sentimientos y sensaciones vividas con anterioridad. Gracias a la memoria somos capaces de mantener un aprendizaje motriz, saber leer y escribir, tener recuerdos de la infancia, saber dónde hemos dejado los objetos, acordarse de conducir, tenemos la capacidad de recuperar y recordar la experiencia de toda una vida.
Para trabajar la memoria de manera efectiva no se pueden dejar de lado el resto de funciones cognitivas que existen y que se relacionan entre sí para el correcto funcionamiento cerebral. Es por ello que en los talleres impartidos en Teulada-Moraira se realizan ejercicios en los que también se trabaja la atención, las funciones ejecutivas, el lenguaje, la percepción, la orientación, etc. Todas estas funciones se trabajan a través de actividades de interés para las usuarias de los talleres.
Durante este tiempo las actividades propuestas han sido muy diversas. Se han realizado fichas de todo tipo, juegos de mesa, propuestas de arte, ejercicios orales, trabajo de las praxias, razonamiento lógico, ejercicios de orientación con mapas o tangrams, y un largo etcétera de ejercicios variados en los que se pretende activar las funciones cognitivas e incentivar el interés de las usuarias por seguir asistiendo a los talleres.
Actualmente se ha renovado por dos años más el contrato con el Ayuntamiento de Teulada-Moraira para poder seguir impartiendo el Taller de Memoria en estas localidades a través de nuestra empresa, Tacte Social. Seguiremos ofreciendo un contenido de calidad, adecuándolo a las características y necesidades de los usuarios que imparten el taller y fomentando el envejecimiento activo de la población.
